Cascada de la Cimbarra, Salto del Cimbarrillo y Charco del Negrillo, Aldeaquemada (Jaén)

Aldeaquemada está situada al norte de la provincia de Jaén, en el centro de Sierra Morena en el Parque Nacional de Despeñaperros y si por algo es conocida, es precisamente por la Cimbarra. Esta espectacular cascada de agua de unos 40 metros de altura, se encuentra a unos 2 km. del pueblo en dirección sur y tiene la categoría de Paraje Natural. Este paraje alberga tres hermosas cascadas, el Cimbarrillo, en el arroyo de Martín Pérez, el Charco del Negrillo, en el río Guarrizas y la Cimbarra, que es la mayor.
Dependiendo de la época del año en la que nos encontremos, la cascada llevará más o menos agua. Si queremos verla en todo su esplendor, lo mejor es visitarla tras una o dos semanas de lluvias intensas. Es recomendable llevar calzado cómodo y antideslizante ya que el terreno puede estar resbaladizo debido a la humedad. El recorrido se puede hacer con niños siempre que estos no sean demasiado pequeños y siempre con mucha precaución, yo creo que una buena edad sería a partir de unos siete u ocho años.
El camino de acceso a la cascada está en buen estado y la zona se encuentra bien señalizada, siendo de fácil acceso. Pasada Aldeaquemada cogeremos una pista que, paralela al río Guarrizas, nos llevará hasta lo alto del Collado de La Cimbarra donde encontraremos un gran cartel informativo y donde dejaremos el coche. A partir de aquí nos tocará seguir el camino a pie.

A la derecha sale un pequeño sendero que nos llevará hasta la cascada. Ya antes de llegar podremos oír el ruido del agua al caer. Para descender al pie de la cascada hay que seguir un pequeño sendero empedrado; a mitad de camino más o menos veremos los restos de un viejo molino abandonado y un poco más abajo encontraremos la laguna de La Cimbarra. Si en vez de de descender continuamos el sendero empedrado hacia arriba, llegaremos a unos miradores desde los que tendremos una vista frontal de la impresionante cascada.

Ahora bajaremos a buscar el salto de Cimbarrillo y para ello volveremos al lugar donde hemos dejado el coche y con él seguiremos la pista que habíamos traído en dirección al área recreativa del Arroyo de Martín Pérez. Aquí podemos encontrar mesas y chimeneas donde encender fuego por lo que resulta un lugar ideal para pararse a comer.
Seguiremos el sendero que discurre paralelo al arroyo y que está muy bien señalizado con postes  con flechas que indican la dirección. En algunos tramos hay que cruzar el arroyo por lo que si está muy crecido no podremos seguir a delante, pero si no es así llegaremos hasta una especie de cueva por donde el agua se despeña en forma de cascada escalonada, es el salto del Cimbarrillo.

Nos damos la vuelta y salimos de la cueva para seguir el camino un poco más. Lo siguiente que nos encontraremos será el punto en el que se unen el río Guarrizas y el arroyo de Martín Pérez y un poco más adelante podemos ver el Charco del Negrillo, que es otra bonita cascada. Aunque para poder verla bien, habrá que escalar por unas rocas un tanto escarpadas y que pueden resultar peligrosas para los niños.

Ahora solo nos queda volver sobre nuestros pasos para regresar al área recreativa donde dejamos los coches.
El paisaje que puedes observar en todo el recorrido es espectacular y si vamos en silencio quizás podamos sorprender a alguna nutria de las que habitan en la zona.