Para hacer esta ruta tomaremos un camino que sale a mano izquierda, como a un 1km, después de pasar el quiosco de la Cerrada de Utrero. Este camino nos llevará hasta el área recreativa de Linarejos, está señalizada.
Dejaremos el coche en este área recreativa donde encontraremos una presa-piscina que en los meses de verano nos invita a darnos un refrescante baño.
El sendero comienza en la entrada al campamento de Linarejos, una antigua instalación juvenil. Continuaremos siempre por el sendero en el margen derecho del arroyo hasta llegar a una zona pedregosa. Tendremos que irnos fijando en las señales, aunque todos los cruces del sendero son hacia la derecha. Podemos disfrutar de unas pozas idílicas y del sonido del arroyo mientras caminamos entre la vegetación y las rocas que encontraremos en este pintoresco sendero. La ruta termina en un paraje rocoso que forma un mirador natural. Aquí deberemos tener mucho cuidado, sobre todo si vamos con niños, ya que no hay vallas de protección y puedes caer al vacío si te arrimas mucho al borde. Desde este punto tendremos unas buenísimas vistas del valle, de la Cerrada del Utrero y de la cascada de Linarejos, que en esta ocasión no llevaba agua apenas. También podemos contemplar el vuelo de los buitres que se posan en las paredes del cañón, por lo que es imprescindible llevar los prismáticos.
El regreso se hace por el mismo camino que hemos seguido para llegar hasta aquí.
El macizo montañoso de la última imagen es impresionante.
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